Hoy en día es necesario tener una cámara de videovigilancia de calidad para cuidar tu patrimonio y que puedas tener pruebas por cualquier incidente. Habiendo una gran gama de tecnología en el ámbito, es difícil para algunas personas saber qué cámara precisa dependiendo de sus necesidades.

Y para esos casos este blog les podrá ayudar.

Las cámaras de vigilancia contienen un sistema de alarma que impide la intrusión en el inmueble, en caso de que ésta se de, son capaces detectarlo y notificar de manera inmediata a quien corresponda.

Dentro de sus propósitos está el monitorear la actividad de las personas dentro y/o fuera de la vivienda o inmueble donde se coloque, así mismo el tener registros y recopilar pruebas de posibles delitos.

Dado el gran mercado de cámaras que existe en la actualidad y que va en ascenso, es más que probable que nos saturemos de información y características que pueden parecer necesarias pero que tal vez no vayamos a utilizar, he aquí una lista de lo que posiblemente debas buscar a la hora de elegir un sistema de seguridad.

*Calidad en la detección de rostros y zoom

*Visión nocturna eficiente

*Alarma integrada

*Almacenamiento suficiente

*Conexión a WiFi

Calidad en la detección de rostros y zoom

Una buena calidad en la imagen brinda tranquilidad y es de suma importancia en caso de que surja algún evento delictivo.

Se necesita de 4 a 8 mpx en promedio para una buena cámara de seguridad en un hogar. Esto garantiza que la grabación contenga una imagen nítida, clara y no esté distorsionada.

Esto puede incrementar el costo y generar una mayor inversión, pero de esta manera se podrá reconocer a los intrusos y presentar evidencia. No sirve de mucho contar con buen color en la imagen si no se pueden reconocer detalles como el rostro de una persona o número de placas de un vehículo.

Recuerda que tu seguridad y la de tu familia es una prioridad que merece una buena inversión.

Visión nocturna eficiente

No basta con tener una imagen clara de día. De acuerdo con datos del INEGI, el 55.8% de los robos a casa ocurren de noche.

Es importante obtener registro de los posibles robos que sucedan en cualquier hora del día y una cámara con buena calidad en el día y en la noche no es un lujo sino una necesidad para cuidar del patrimonio.

La visión nocturna infrarroja baña el área con luz que es invisible a nuestros ojos.

Existen diferentes tipos de visión nocturna. El más común en cámaras de seguridad es la visión nocturna infrarroja (IR).

En su exterior podrás notar que está cubierta de bombillas LED, la cual es luz IR, y al anochecer se encienden para actuar como luz de tipo inundación, sumergiendo el campo de visión de la cámara con luz IR.

Si se coloca una cámara de visión nocturna cerca de una ventana, las luces IR se reflejarán en el vidrio.

Alarma integrada

Dentro de los tipos de cámaras de seguridad, existen de varias formas y materiales, como, antivandálicas con movimiento, tipo bala, de metal, de plástico, entre otras. Sin embargo una característica que no puede faltar es la integración de una alarma eficiente que ayude a la detección de robos o accidentes.

Para cualquier posible intromisión de la vivienda o negocio, hay que tener una cámara que cuente con sensores de movimiento que detecten anormalidades en el espacio que vigilan y que activan una alarma que avisa a los propietarios y autoridades.

Almacenamiento suficiente

Existen cámaras de seguridad que cuentan con un formato de compresión inteligente que permiten ahorrar 80% de almacenamiento y ancho de banda (si es que está conectada al wifi), esta característica llamada H. 265+ te ayuda a contar con más horas de grabación y a no tener que estar depurando y seleccionando archivos para obtener más espacio.

Conexión a Wifi

Esta característica te brinda beneficios en el hogar. Ya sea que quieras cuidar de una mascota, una habitación en particular, un adulto mayor, entre otros. Puede venirte bien cuando sales de casa sin preocupaciones.

En caso de que busques un sistema de vigilancia para negocios y empresas, esta particularidad está de más.

Autor: Alexandra M.